lunes, 18 de junio de 2012

Ponele que por alguna razón te hacés una sopa.

Ponele. La cosa sería así. Meté unos morrones rojos al horno, así enteros. Pasate un poco de aceite por las manos y como un fetichista sexual, embadurnalos por afuera. Todos en una placa, y al horno caliente. La idea es sacarles la piel. También podría andar a la parrilla, si se enciende una parrilla, o sobre la hornalla, pero vas a enchastrar todo. Así que al horno digamos. 1 por persona y 1 extra, para algún fantasma. Listo, eso al horno. Mientras, cortate alguna cebolla grande, chiquititamente. Y otro morrón, también chiquititamente. Un par de ajos. Listo. Olla al fuego, se calienta y tirá adentro un poco de aceite y la cebolla. Ya sabés cómo es esto, sos ya un Hornotransformista. Agregá el morrón que cortaste y el ajo. Remové, agregá un toque de sal y pimienta. Se ablandan esas cosas y agregá un chorro de vino que cubra. En otra hornalla ponete a hervir agua con algún caldito de verduras adentro. Bajá el fuego de la primera hornalla, o sea de la olla, y si tenés por alguna casualidad de la vida estracto de tomate, agregá una cuchara sopera adentro, con la cebollita y todo eso. Mezclá. Bajá el fuego, o apagalo mejor, así no se quema todo. LOS MORRONES DEL HORNO!!! Vas a empezar a escuchar ruidito en algún momento. La piel se va como a levantar, por el aceite que les acariciaste. Rotalos, si tenés ganas y seguilos cocinando. Ponele que pasó media hora de horno, fijate si les podés sacar la piel. Guarda que ta tuyo. O sea, quema. Dejalos enfriar un toque sobre la mesada. Sacales la piel, las semillas y el cabo. Guarda que adentro seguro hay líquido y eso sí quema más. Bueno, procesá todo eso. O machacalo. Rompelos todos, que quede tipo puré. Agregá eso a la verduritas después del estracto, y el caldo. Si querés mandale un chorro de crema también. Dejá hervir un ratito. Probá, condimentá. Tostate unos panes. Alquilate todas las de Rocky. Hoy sale sopa. Pd. Como dato loco, podés agregar tomillo, u orégano. Si son frescos mejor. Sale, sale.